El picor puede ser una forma que tiene nuestro cuerpo de alertar sobre la incidencia de alguna bacteria o sustancia inadecuada, o, también, un indicador del estrés que sufrimos

Prurito

El prurito, que es como se denomina la reacción del picor en medicina, puede ser generalizado o en zonas concretas, y puede deberse a múltiples causas. La primera reacción del ser humano es rascarse o frotarse la piel con el objetivo de eliminarlo, algo que es un error ya que en la mayoría de los casos no llega a eliminar esta sensación y además puede ser contraproducente.

El diccionario médico de Doctissimo lo define como la “sensación cutánea desagradable y de intensidad muy variable que provoca una necesidad de rascarse para obtener alivio. El prurito puede considerarse un síntoma frecuente en numerosas enfermedades tanto cutáneas (eczema, liquen, prurito, etcétera) como de otra índole (diabetes, hiperparatiroidismo, hiperuricemia, retención biliar, hipercalcemia, trastornos tróficos e incluso trastornos psicológicos, entre otras)”.

Los motivos por los que se puede producir el picor son muy diversos, generalizando, puede ser un indicador del estrés o un mecanismo de alerta frente a una bacteria, infección o sustancia inadecuada para nuestro organismo. La molécula denominada BNP o péptido natriurético B, que se libera en la médula espinal es la encargada de transmitir la sensación de picor al cerebro. En 2013 pudo comprobarse, gracias a un experimento realizado con ratones que, si se elimina dicha molécula, desaparece también el impulso de rascarse.

 

El efecto adverso de rascarse

La acción de frotarse y rascarse la piel siempre es el primer estímulo que nos produce el picor. Al hacerlo, se produce un dolor -estímulo contrario- que bloquea el envío de la señal de picor hasta la médula espinal. El picor se diferencia del dolor también en la sensación que produce y en que tiene su propia línea de conexión con el cerebro.

El alivio originado de rascarse es sólo momentáneo, ya que el dolor genera la liberación de serotonina, que actúa como analgésico y vuelve a producir picor como efecto secundario. Es decir, que lo único que produce rascarse es más picor.

 

Para saber más sobre el picor, leer el siguiente artículo de la sección de salud de La Vanguardia: https://www.lavanguardia.com/vivo/20180925/452027216287/picor-rascarte-no-sirve.html

También se ha consultado la siguiente fuente: http://www.doctissimo.com/es/salud/diccionario-medico/prurito